01-06-2022
Autor
TAU Editoial Team
Para seguir en la carrera del emprendimiento y/o profesional, tanto las personas como los negocios, necesitan ampliar y expandir la mentalidad hacia lo digital.

Editorial de TAU para el segundo semestre del 2022 / Del 01-06-2022 al 31-12-2022.

La tecnología digital ha sido durante las pasadas décadas el protagonista más brillante de los diferentes avances tecnológicos modernos que hemos podido presenciar. Pasamos de la tecnología analógica a la digital en un abrir y cerrar de ojos, y nuestro mundo ya no fue el mismo.

Para seguir en la carrera del emprendimiento y/o profesional, tanto las personas como los negocios, necesitan ampliar y expandir la mentalidad hacia lo digital. Si bien es cierto, que ya estábamos yendo por ese camino, este cambio se gestaba de manera lenta y progresiva. Sin embargo, la pandemia aceleró este proceso de transformación, para poder garantizar la continuidad de negocios y servicios. Es por eso que hoy el mundo requiere que las personas y los negocios, puedan trabajar en remoto o en entornos híbridos y para ello necesitan desarrollar una mentalidad digital.

Los estudios a distancia en TAU por Internet (eLearning), promueven un Mindset Digital, significa tener una mentalidad digital para poder hacer cambios en nuestras vidas y en las organizaciones, reinventarse, aprovechando el potencial de las tecnologías y las nuevas metodologías surgidas de la digitalización.

¿Qué es la mentalidad y la cultura digital?
Significa adquirir una mentalidad de lo digital, donde cada miembro del equipo aprecia el potencial de la tecnología para fomentar la innovación. De esta forma, incentiva algunos aspectos y actitudes de trabajo: Ayuda a comprender las necesidades en una sociedad digital y a descubrir cómo adoptar nuevas tendencias.

¿Cómo desarrollar una mentalidad digital?
Significa implementar un Modelo Colaborativo y de Comunicación, que incluya entre otros aspectos:
Capacidad de interactuar mediante tecnología Digital.
Compartir información y contenidos digitales.
Activar una ciudadanía digital.
Promover  el trabajo colaborativo mediante canales digitales.
Tener claridad del concepto “Netiqueta”. 
Hacer una buena gestión de su identidad digital.

Existen tres características imprescindibles en la cultura digital y que contribuyen a la generación de contenido, interacción social y creación de nuevas:
Empleo masivo de la World Wide Web.
Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC).
Empleo de redes sociales.

Los cinco elementos clave de una cultura digital:
Promueve una orientación externa, más que interna.
Se premia la delegación sobre el control.
Alienta la audacia sobre la precaución.
Destaca más acción y menos planificación.
Valora la colaboración más que el esfuerzo individual.

¿Cuáles son los objetivos de la cultura digital?
El objetivo de la cultura digital es, entonces, mejorar los modelos, procesos, estructuras y sistemas existentes, lo que depende de un cambio de mentalidad impulsado por la gestión empresarial.

¿Cómo influye la cultura digital en la vida cotidiana?
La tecnología bien aplicada nos ayuda, por ejemplo: a organizarnos mejor, a aprender cosas nuevas, a llevar registro de nuestras metas y avances personales o a acortar distancias con amistades o familiares.

La mentalidad y cultura en la empresa digital
¿ Cómo implementar un cambio de mindset en nuestras organizaciones ?
Las organizaciones buscan ser más ágiles e innovadoras que nunca y adoptar unas capacidades orientadas a las posibilidades que ofrecen las tecnologías actuales, y así poder aprovechar todas las oportunidades que ofrece el nuevo entorno digital. Pero para ello es fundamental transformar la cultura de la empresa, crear conciencia y aplicar nuevas habilidades y formas de trabajo que fomenten esta innovación y adaptación al cambio.

Los pasos que llevan a la creación de una correcta cultura digital:
Identificar y desplegar agentes o embajadores del cambio e involucrar y apoyar a los empleados en el fomento de la cultura digital.
Aplicar indicadores de desempeño digital (KPI) que se centren en la adopción y evolución de comportamientos más que en logros o errores.
Utilizar herramientas colaborativas para aumentar la transparencia y llegar a todos los empleados; fomentar trabajo colaborativo que conecte a los empleados con la dirección.
Invertir en las competencias digitales que realmente son prioritarias.
Hacer tangible el cambio de cultura.
Transmitir con claridad en qué consiste el enfoque digital y hacer visible la implicación de la alta dirección (por ejemplo, el desarrollo de nuevos comportamientos y actitudes por parte de los directivos les convertirá en modelo a seguir).
Adoptar un enfoque sistémico.

Las tecnologías digitales pueden aportar un importante valor, pero las empresas solo podrán aprovechar ese potencial si adoptan la cultura digital adecuada, desplegada y sostenida en el tiempo.

Las empresas deben utilizar un modelo que apoye e inspire a todos los empleados para propiciar un cambio cultural de forma conjunta", al tiempo que advierte que "reducir la falta de conexión entre alta dirección y empleados es un factor clave para el crecimiento".

Las empresas que hagan de la mentalidad y cultura digital un eje estratégico verán mejorar sus relaciones con los clientes, atraerán el mejor talento y se situarán en el camino hacia el éxito en el mundo digital de hoy.

Las principales competencias digitales que son consideradas un plus en la actualidad para un profesional son,  entre otras:
Información y alfabetización de datos. Navegar, buscar y filtrar datos, información y contenido digital. 
Comunicación y colaboración. Interacción a través de las tecnologías digitales. 
Creación de contenido en formato digital. 
Seguridad. 
Resolución de problemas.

REF: TAU Editorial Team et al., 2022.